Vamos con la tercera entrevista de esta temporada. Tras la publicación de todas las que tenemos ya programadas, esta sección tendrá un descanso al menos hasta el próximo año. Si queréis leer las anteriores entrevistas a escritores, podéis hacerlo aquí.
Hoy nos acompaña Adrián Abramo, un escritor de Santander que comenzó en el mundo literario como reseñador en su blog Devorador de libros.
1. ¿Cómo equilibras tu vida personal y tu vida de escritor/a?
La verdad es que es bastante complicado. Entre trabajar, estudiar, leer, escribir… A veces me sorprende ser capaz de hacer todo. Lo mejor es buscar un momento del día, marcarlo como “rato de escritura” y hacer una rutina. No tienen que ser todos los días, se puede alternar, escoger dos… Cada cual según su día a día.
2. ¿Tienes algún lugar o entorno específico en el que te sientas más productivo/a al escribir?
He intentado escribir en distintos sitios, desde la universidad hasta el trabajo, pero creo que el único lugar donde estoy cómodo y concentrado es mi habitación, con la música de fondo y un café al lado.
3. Tengas o no un lugar o entorno específico… ¿Tienes alguna rutina o ritual creativo antes de empezar a escribir?
Aparte del café ya mencionado, no creo tener ningún ritual. Por lo general, con llevar ropa cómoda (chándal o pijama) y tener la música de fondo, me sirve.
4. ¿Cuál es tu proceso creativo? Desde que tienes la idea hasta que escribes el libro.
Cuando surge la idea, lo primero que hago es apuntarla en el móvil. Ahí la dejo “macerar” un poco, ver cómo puedo extenderla y dar pie a una posible historia. Una vez consigo estar convencido, hago una lluvia de ideas con mi novio y mi mejor amiga para concretar detalles, escenas, giros argumentales… Eliminar cualquier incongruencia, por así decirlo.
A partir de ahí, solo queda empezar a escribir e ir encajando todas esas piezas poco a poco. Algunas nunca llego a usarlas, otras cambian, pero lo importante es que la historia me enganche para seguir con ella.
5. ¿Qué consejo valioso sobre escritura recibiste en tus primeros años como escritor/a y que aún sigues aplicando?
Más que un consejo, es un recurso: las fichas de personaje. Pueden parecer simples, pero son una herramienta muy importante y que yo tardé en usar correctamente. Para que una historia parezca real, sus personajes tienen que serlo también. Descripción física, personalidad, contexto, guiños, ticks… Cada uno debe ser único y diferente al resto. Si todos los personajes fuesen iguales, no aportarían nada a la trama.
6. ¿Por qué elegiste escribir fantasía? ¿Qué es lo que más te atrae de este género?
Además de escritor, también soy lector, y desde pequeño me ha gustado mucho la novela fantástica. Creo que es uno de los principales motivos por los que me decanté por este género.
Una de las cosas que más me gustan de la fantasía es la cantidad de opciones que presenta. Crear mundos de magia, basados en mitologías, con nuevos dioses, unir planos, invocaciones, criaturas fantásticas… Siempre que la historia sea coherente, este género permite todo.
7. ¿Cuál es el mayor desafío que has enfrentado como escritor/a y cómo lo superaste?
No sé si me he encontrado con un desafío muy grande, aunque sí tengo alguna idea similar. Hace años quise cambiar un poco el género de mis historias y escribí una novela de romántica juvenil sin fantasía. El resultado fue horrible, pero aprendí con ello. Además, hace poco volví a intentarlo y, esta vez, me gustó mucho lo que surgió.
8. ¿Cuál es tu proceso de revisión y edición favorito para pulir tus manuscritos?
Por lo general, siempre sigo el mismo proceso. Nada más terminar de escribir la novela, espero unos días a que asiente antes de revisarla. Una vez corregida por mí, se la paso a mis lectores beta. Y, a medida que me lo envían de vuelta, voy realizando nuevas correcciones.
9. ¿Has tenido alguna experiencia memorable con un lector o fan de tu trabajo que te haya impactado profundamente?
Guardo un recuerdo muy bonito de la Feria del Libro de Madrid 2023. El día que me tocaba firmar, fui con una amiga a hacer tiempo en la cola de una autora. Pues la chica de delante, casi al momento, sacó mi libro de su mochila y me preguntó si era el autor. El mero hecho de que me reconociese fue un subidón de serotonina.
10. ¿Cómo manejas las críticas y la retroalimentación negativa en tu trabajo?
Bien y mal, ja, ja. Me explico: si una reseña o una crítica negativa está escrita con educación y aporta motivos, la acepto e intento aprender de ella. En cambio, cuando recibo críticas sin fundamento, que son ilógicas y que parece que no se han leído el mismo libro que yo he escrito, prefiero ignorarlas, porque me suelen afectar bastante emocionalmente.
DEMONIOS A MEDIODÍA
Creo que es una historia muy importante porque es el nacimiento del vínculo entre Lía, Faustus y Chrys, que es el encargado de ir a buscarles. Es una escena que me disfruté escribiendo, porque marca un antes y un después en el libro.
“La atmósfera tensa estalló cuando la taza de café impactó contra el suelo y se hizo añicos.—No puede ser —musitó Roderick mientras su corazón se encogía de angustia y miedo.”